Voy a ser claro desde el principio; tenéis que ver Nebraska, independientemente de lo afines que seáis a consumir películas, independientemente de las sensaciones que busquéis al consumir películas, tenéis que verla.
La cinta nos presenta a Woody Grant (Bruce Dern), un anciano atacado por la demencia que recibe por correo una supuesta notificación que le hace "ganador" de un premio de 1.000.000 de dólares, y debe cruzar varios estados para recoger el premio, Woody cree ser rico y gracias a su terquedad logra convencer a su hijo David (Will Forte) para que le lleve a canjear el premio, en su camino la relación entre David y su padre destrozada por el alcoholismo de este último tomará un nuevo rumbo, para sorpresa de la madre (Jane Squibb) y el hermano de David (Bob Odenkirk). Planteamiento sencilla para una obra sencilla y su vez magistralmente ejecutada.
Lejos del dramatismo postizo y metido con calzador al que nos tienen acostumbrados, Nebraska reluce con una de las historias más conmovedoras de los últimos años, logra emocionarnos con total naturalidad, simplemente con un gesto o una mirada, y de eso se trata; Todo en esta película es a pequeña escala, todo genera una sensación de humanidad real, como si alguien hubiera dejado una cámara grabando en un pequeño pueblo donde todos se conocen. Narrada con planos sencillos y en blanco y negro es otro magnífico ejemplo de que en muchas ocasiones menos es más. La dirección en esta película no es plenamente determinante, sino que sirve más como un apoyo para darle forma a la composición de la obra, esa sensación de sencillez.
El guión es la pieza fundamental de la película, no sobra ni falta un solo detalle, y a pesar del ritmo relajado de la cinta, también me resultó muy divertido, no llega a la comedia pero presenta escenas (como la búsqueda de los dientes de Woody) con las que no puedo evitar sonreír mientras escribo estas líneas. Cada personaje está perfectamente escrito, y os aseguro que durante el viaje padre e hijo encontrarán bastantes personajes, todas sus actuaciones son más que notables y el elenco de actores es el idóneo, cada uno de los personajes principales tiene algo que los hace únicos, especialmente el adorable Woody.
Si os gusta el cine, por poco que sea, tenéis que ver Nebraska.
Critica realizada por: Luis Fabregat
Critica realizada por: Luis Fabregat