Ayer estuve reviviendo una de mis películas favoritas, Harry Potter y el cáliz del fuego. En mi opinión, y creo que en la de muchas más personas, la saga del famoso mago es una de las mejores series cinematográficas de magia jamás vistas. Todos los elementos están equilibrados a la perfección, no hay exceso de ningún tipo: los elementos fantásticos dan el aire justo para enganchar a su público, hay la acción justa para lograr concentrarse en la trama principal y el romanticismo suficiente, dado en pequeñas dosis, como para que no llegue a ser un pastelón.
Centrándonos otra vez, no es una de las películas que mejor se adapta a su versión en papel redactada por la famosa escritora J.K. Rowling. Al principio nos encontramos con la Copa Internacional de Quidditch, donde por la noche, después de un ataque por parte de los mortífagos, se muestra en el cielo una señal de que el señor oscuro está cerca, presagiando que en esta entrega no faltará acción ninguna. Es más, es una de mis partes favoritas porque la mezcla de drama y acción hacen de esta una singular secuela, interesante e intrigante a la vez.
De vuelta a Hogwarts, se ve la llegada de unos alumnos que no pertenecen a esta escuela. Esto le da un aire y una frescura que nos permite centrarnos también en nuevos personajes. Estos alumnos pertenecen a dos escuelas diferentes, vienen a Hogwarts para participar en el torneo de la Copa de los Tres Magos. Es la primera vez en toda la saga en que vemos a Harry exponerse en un ambiente tan competitivo. Este concurso entre alumnos es un gran atractivo para el público adolescente. También se ve la extraña aparición de un nuevo profesor, Ojo Loco, que con sus no tan disciplinadas conductas educativas no tendrá a todo el profesorado de su parte. A lo largo del filme también se pueden observar conductas sospechosas que pondrán a Ojo Loco en el punto de mira.
Norma principal de este torneo era que no podía participar ningún alumno menor de 17 años. Sospechosamente, Harry es elegido por la copa como un participante más. Esto hace sospechar a los profesores de que alguien se la ha jugado a Harry, no siendo esta la primera vez. Además, los alumnos le hacen bullying por este acto, dándole más protagonismo del que ya tenía hasta ahora.
Durante las 3 pruebas en que consiste el torneo Harry se ve enfrentado a otros alumnos mayores que él y de más categoría. En estos enfrentamientos Harry demuestra poder superar con creces estas pruebas, poniéndose en el mismo nivel o superior que el de sus adversarios. Con este acto la escritora da a reivindicar que, a pesar de la edad, Harry es un gran mago. Con una muerte, un destape de la identidad de Ojo Loco y la vuelta de Voldemort al mundo de los vivos finaliza la película; este acto marca un antes y un después en la famosa saga. En la saga de Harry Potter nunca existen finales felices del todo.
En esta entrega vemos la evolución tanto física, mental como mágica de los protagonistas Harry Potter (Daniel Radcliffe), Hermione Granger (Emma Watson) y Ron Weasley (Rupert Grint). Por primera vez Harry se siente atraído hacia una chica, la joven Cho Chang, mientras que Ron comienza a experimentar celos hacia Hermione. Así es como vemos la aparación de interés sexual en los jóvenes personajes de este film. Además de esto, se puede observar como evolucionan gratamente sus poderes, haciendo de ellos unos grandes e intelegentes magos para su edad. Este rodaje ha evolucionado tanto estáticamente como narrativamente, el escenario cada vez es más variado y los personajes demuestran más madurez.
Ventaja que destacaría yo es la madurez que han presentado los personajes. En contra, diría que no es la obra mejor adaptada de esta saga y que la duración tal vez sea excesiva, aunque tampoco se pierde nunca el interés de la trama.
Trailer:
Critica realizada por: Blanca Alonso
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Critica realizada por: Blanca Alonso